LQSomos. Julio Ortega Fraile*. Agosto de 2011.
Existe un denominador común entre cazadores y toreros. Es obvio que hay más y su evidencia se ve, se toca, se oye y hasta se huele, porque el miedo y el dolor es lo que tienen: que el cerebro muestra ante ellos una permeabilidad que a todos llega, sólo que algunos únicamente les conceden importancia cuando son propios y desprecian los ajenos.