23 ene 2011

Haití: "tan lejos de Dios y tan cerca de los Estados Unidos"

LQSomos. Mónica Oporto. Enero de 2011.






Hace algunos años llegó a mis manos un texto de GIovanni Pappini. Hoy volvió a mi memoria cuando veía las imagenes de "Baby" Doc-Duvalier regresando impunemente a Haití.
Haití país castigado por la mano del hombre, por las ambiciones, por la dominación, el clima, el imperialismo, la dictadura... Una república que se disputan los poderosos, un suelo ambicionado por grandes capitales para la inversión" sumamente rentable aunque hoy sea la tumba de tantos desheredados. Una república que, a no dudarlo, terminará, si Baby Doc Duvalier logra "su cometido" (es decir, el que le encomendaron desde los Estados Unidos) como en el cuento de Pappini que he copiado al final de estas palabras.

Haití: la historia que todos deben conocer. el pasado sustenta el presente

Haití fue paso obligado a partir de la conquista y colonización española de América. Sufrió el duro embate y exterminio de su población. Posteriormente, la llegada de franceses a mediados del siglo XVII, constituyó una nueva colonización. Casi a fines del siglo se produjo la cesión de la zona a Francia, con el nombre de Saint-Domingue, de lo que luego se llamaría Haití.

En el pequeño territorio que ocupa han sido gigantescos los enfrentamientos y las muertes, las ambiciones enfrentadas y las luchas por la libertad de miles de esclavos. Ha sido tierra de luchadores patriotas y de traidores. Tierra arrasada por las guerras de conquista, de España, de Inglaterra, de Francia y más recientemente de los Estados Unidos. La parte francesa de la isla era productora de azúcar, café, entre otros productos que se cultivaron gracias a la abundante mano de obra esclava negra. Una sociedad duramente estratificada entre los blancos y entre los negros. Blancos poderosos y otros menos poderosos, mulatos y negros esclavos. Hombres libres y hombres esclavizados. Esclavos en penosas condiciones de trabajo que a veces podían escapar a las montañas o pasar al lado español (cimarrones) cansados de sufrir. .

En la guerra de independencia de los Estados Unidos participaron algunos contingentes de haitianos enviados por Francia. Participar de la guerra los puso en contacto con las ideas derivadas de la revolución francesa y  fue así que en 1790 un grupo de mulatos, comandados por Vincent Ogé y Chavannes, exigieron igualdad de derechos para mulatos y negros. Un año después se produjo una rebelión de esclavos que, en 1792, terminó con el reconocimiento por parte de Francia de  la ciudadanía a los “hombres libres de color”.

Un líder como Toussaint Louverture  luchó contra los intentos británicos y llegó a convertirse en un dirigente de gran importancia y hasta proyectar el restablecimiento de la economía e incluso una constitución para Haití. Sin embargo Napoleón no toleró semejante actitud y envió tropas a la isla para restablecer la esclavitud y completar su aspiración a formar el imperio. No obstante la colonia logró su independencia de Francia y desde entonces se llamó Haití.

Después vino la etapa de la dominación por parte de los EEUU que mantuvieron a Haití aislada durante mucho tiempo: una nación gobernada por ex-esclavos y un mal ejemplo para los países esclavistas.

De aquél pasado sangriento y triste quedaron marcas profundas que no han podido superarse. La economía, de plantaciones terminó siendo economía de subsistencia. Es el país más pobre de América latina. Alguna vez leí que cada habitante consume menos de un kilo de carne por año. Y si recordamos aquella poesía del célebre Trilussa acerca de las mentiras de las estadísticas... "¿Sabes qué es la estadística? /La que hace el recuento general /
de los que nacen van al hospital, / a la curia, a la cárcel o la fosa / pero para mí, la cosa es más curiosa / cuando hacen el promedio individual / en lo que todo se reparte por igual, / aun en la población más menesterosa / y, resulta cierto y sin engaño / que según la estadística del año / te toca un pollo y medio cada mes/ y aun cuando el pollo en tu mesa, / se halle ausente / entrás en la estadística igualmente /porque hay alguno que se come tres
."  podemos colegir que alguno no comió ni un gramo y otro pudo haber comido la parte del anterior...

Hace algo más de un año leí que algunos estudios realizados por la empresa láctea PIL Andina, determinaron que el consumo de leche en Bolivia es de 42 litros por persona al año. Sin embargo, en relación a los últimos cinco años se habría elevado desde 33 litros considerándose llegar a 42 como un avance nutricional. La Organización para la Agricultura y la Alimentación, FAO, recomienda como mínimo el consumo de 150 litros por persona al año. De tal manera que nuestra realidad ni siquiera llega al tercio necesario para un desarrollo adecuado de la población. A nivel latinoamericano, el promedio es de 80 litros y nuestro país es inferior al de nuestros vecinos, compartiendo el último lugar con Haití (1)


El camino de Haití: de la independencia a las garras de Duvalier
A partir de su independencia (1804) Haití no consiguió la paz. Fue el primer país de América latina en proclamarse independiente, sin embargo seguirían las pugnas entre algunos sectores por lograr el poder, con revueltas militares para deponer a unos y castigar a otros. Fueron comunes las proscripciones y las ejecuciones. Hasta llegaron a tener un Emperador, Faustin I, que se rodeó de una corte conformada por una nueva nobleza. Faustin I, antes había sido un general de nombre Soulouque, que llegó a ser presidente de la República de Haití y que incluso intentó apoderarse de República Dominicana, aunque finalmente debió abandonar el país.

Siguió la inestabilidad política que se reflejaba en la economía también tambaleante como coletazo en los tiempos de la 1º Guerra Mundial en que las economías productoras de productos primarios se vieron alcanzados por la baja de los precios. Por entonces Estados Unidos ejerció su dominio sobre Haití (1914) y controló sus aduanas y toda la vida política por más de 15 años. El continuismo de la política de intervención de Estados Unidos sobre Haití (similar a lo ocurrido en Cuba después de la guerra hispano-norteamericana, complementada por la "enmienda" Platt) se dio a través de figuras pro-norteamericanas que gobernaban la República de Haití según los intereses de Estados Unidos.  La historia de Haití pareciera no tener etapas de bienestar, de felicidad para su pueblo. Tan sólo han caído desgracias sobre ese suelo y ese castigado pueblo. En 1957 llegó accedió al gobierno por elecciones "Libres"... apoyado por el Ejército y como  “Papa Doc”, continuó gobernando por 25 años como dictador contando con el respaldo de los EEUU que, al igual que hizo en Cuba, apoyó y financió la dictadura para mantener los recursos bajo su control.
Duvalier gobernó como presidente vitalicio y para los que no entendieran esta situación creó una especie de policía "especial" (Tonton Macoutes) encargados de "disciplinar a la oposición" (parafraseando a Eduardo Galeano). Pero los sucesivos gobiernos encontraron una población sumida en la pobreza y la ignorancia, con una economía basada en la producción de productos primarios y donde la acción de los Tonton Macuotes continuó como mecanismo de control social, asociado al vudú para imponer y reforzar el terror, violando sistemáticamente los Derechos Humanos  mediante torturas, muerte, secuestros, extorsiones. Era costumbre de los miembros de esta policía utilizar gafas oscuras y machetes largos de cortar caña de azúcar y por mostrar en lugares públicos sus víctimas para "ejemplo" de la población. La violencia utilizada sobre una débil población, utilizando la supersticiosa de la mayoría, sirvió para que Duvalier se perpetuara y corriera una versión de de que Papa Doc era una especie de figura identificada con una encarnación diabólica. Pero el verdadero poder diabólico estaba en su condición de lacayo de los EEUU. Lo sucedió su hijo Jean Claude, “Baby Doc” que fue expulsado de Haití en 1986 mediante una rebelión popular. Estados Unidos nunca abandonó la idea de apropiarse de las islas. No pudo con Cuba, se plantó en Puerto Rico, y está en sus planes  apropiarse de territorios que siempre ha considerado "su patio trasero".

Haití ha sido tierra arrasada por las ambiciones coloniales, fuertemente controlada y castigada por el imperialismo. Un país donde los atisbos democráticos fracasan y contrastan con la realidad de un pueblo viviendo en más que precarias e injustas condiciones, en el reinado de la injusticia y la desigualdad; donde el poder y la riqueza han sido los gobernantes y los únicos beneficiarios han sido sectores altos vinculados al poder imperial. El Estado no logra dar respuesta a las necesidades fundamentales de su pueblo porque ha pasado sucesivamente de manos de unos a otros, respuesta a las penurias de su población, sumergida en la pobreza, en la explotación, en una vida miserable y una peor muerte; en la injusticia más terrible. Un país que no supo sino de dolores no sólo por la mano de generales y gobernantes sino por las inclemencias de factores climáticos que se han sumado como cómplices no voluntarios de la atroz situación de los haitianos... pero siempre el Estado ha sido el gran ausente, tanto para morigerar las terribles condiciones de vida de los haitianos como para dar solución a las consecuencias del terremoto que asoló a la capital hace apenas un año.


“Las tragedias humanitarias tienen Historia. A veces nos golpea la fuerza de la Naturaleza con su desmesura y nos recuerda nuestra insignificancia, pero sobre todo nos recuerda la vergüenza que deberíamos sentir por andar por la vida haciéndonos los distraídos. Haití ha sufrido, como tantos otros pueblos, un terremoto atrás de otro, provocado por las muy humanas manos detrás del capitalismo, por la acción rapiñera del imperialismo…” (Eduardo Galeano)


1.-
http://www.ops.org.bo/servicios/?DB=B&S11=18456&SE=SN